Pesquisar este blog

quinta-feira, 18 de agosto de 2011

Me duele Guatemala

Noticia de El Universal.

WASHINGTON.— Estados Unidos pidió ayer oficialmente disculpas al pueblo de
Guatemala por las “prácticas abominables” y los experimentos encubiertos
con enfermedades de transmisión sexual que realizaron hace más de medio
siglo sus funcionarios del Servicio de Salud Pública entre prisioneros y
enfermos mentales de esa nación centroamericana.
“Lamentamos profundamente que esto haya sucedido y ofrecemos nuestras
disculpas a todas las personas que resultaron afectadas por esas
abominables prácticas de investigación”, aseguraron en un comunicado
conjunto las secretarias de Estado y de Salud, Hillary Clinton y Kathleen
Sebelius, respectivamente.
Las disculpas que Estados Unidos ha tardado 64 años en hacer oficiales,
están relacionadas con uno de los capítulos más sombríos en el mundo de la
investigación científica, con prácticas que algunos han comparado con los
experimentos nazis de la segunda guerra mundial.
“La conducta demostrada durante el estudio no representa los valores de
Estados Unidos ni nuestro compromiso con la dignidad humana y el gran
respeto hacia el pueblo de Guatemala. El estudio es un triste recordatorio
de que las garantías adecuadas para la investigación en seres humanos no
existían hace medio siglo”, aseguraron en su nota de disculpa Clinton y
Sebelius. El motivo de la disculpa, un inusual acto de contrición de
Washington frente a una de las más humildes naciones del hemisferio, está
relacionado con el escándalo de un experimento seudomédico denunciado por
la investigadora Susan M. Reberby en enero de este mismo año.
Más de 600 contagiados
El caso, que se remonta a los años 1946-1948, involucra a médicos
investigadores del Servicio de Salud Pública que actuaron en connivencia
con los responsables de centros penitenciarios y de instituciones para
enfermos mentales para inocular e infectar con sífilis y gonorrea a más de
600 personas en Guatemala, una nación elegida para poder actuar al margen
de imperativos éticos y legales.
En algunos casos, particularmente en las cárceles, se utilizaron como
vectores o agentes de la infección de la gonorrea y la sífilis a
prostitutas.
El objetivo era descubrir si su posterior tratamiento con penicilina les
garantizaba su recuperación. Un proceso que, según denunció la
investigadora, no siempre se desarrolló con el esmero y la diligencia
debida ya que muchos de los enfermos “no recibieron el tratamiento
adecuado”.
“El estudio de inoculación de enfermedades de transmisión sexual que se
llevó a cabo de 1946 a 1948 en Guatemala claramente fue antiético. Aunque
estos sucesos ocurrieron hace más de 64 años, estamos indignados de que
tal investigación reprochable haya ocurrido bajo el pretexto de la salud
pública”, aseguraron Clinton y Sebelius, quienes se comprometerse a
realizar una investigación a fondo de lo sucedido hace más de medio siglo.
Según confirmó el subsecretario de Estado para el Hemisferio, Arturo
Valenzuela, Hillary Clinton telefoneó la noche del jueves al presidente de
Guatemala, Álvaro Colom, para disculparse por un incidente que había
permanecido empolvado entre los archivos del Servicio de Salud Pública
hasta que Reberby lo sacó a la luz para convertirlo en motivo de escándalo
y de una disculpa que, si bien fue emotiva, se produce tardíamente.
El gobierno de Guatemala aceptó la disculpa de la Casa Blanca, pero pidió
una investigación de los hechos. El portavoz de la Presidencia
guatemalteca, Ronaldo Robles, dijo que el presidente de los Estados
Unidos, Barack Obama, se comunicó telefónicamente con su homólogo
guatemalteco, Álvaro Colom, para pedir una “profunda disculpa” al pueblo
de este país centroamericano. Colom calificó esos actos de “espeluznantes”
y de “crímenes de lesa humanidad”. Dijo que, además, hasta donde sabe,
hubo muertos.

Nenhum comentário: